La pandemia de Covid-19 y sus correspondientes bloqueos han tenido múltiples impactos en la industria alimentaria, incluidos los plazos retrasados para las actualizaciones de los sistemas de gestión. Entre estos se encuentra ISO 22000: 2018, un sistema de gestión de seguridad alimentaria (SGSA) que permite a las empresas alimentarias identificar y controlar los peligros de seguridad. La transición, que originalmente tenía la intención de entrar en vigor en junio, se pospuso hasta el 31 de diciembre de 2021.
Los productores, distribuidores y empresas de alimentos ahora tienen un período de gracia de seis meses para prepararse para los requisitos actualizados. En el contexto de Covid-19, donde las medidas sanitarias se han vuelto cada vez más estrictas, completar esta transición es particularmente importante para las empresas que buscan tranquilizar a sus clientes.
EXPLORANDO NUEVOS REQUISITOS Y CAMBIOS
La versión actualizada de ISO 22000 se basa más en los conceptos de gestión empresarial para garantizar que el estándar esté completamente integrado en los procesos comerciales generales de una empresa. Se basa en la estructura de alto nivel de ISO, lo que le permite integrarse con otros estándares de sistemas de gestión.
Las empresas deberán tener en cuenta el contexto de sus organizaciones, identificando los factores internos y externos que las afectan (por ejemplo, cultura empresarial, patrones de consumo de los clientes, tecnologías cambiantes). El estándar actualizado también requiere que la alta dirección sea responsable de la eficacia de un SGIA, proporcionando el apoyo y los recursos necesarios para lograr una mejora continua.
El riesgo es otra área clave que aborda la norma ISO 22000. Se requerirá que las organizaciones identifiquen los riesgos que podrían afectar el desempeño del SGSA y tomen medidas para minimizarlos. Los planes de control de peligros deberán tener en cuenta los Programas de Prerrequisitos Operativos (OPRP) y los Puntos Críticos de Control de Análisis de Peligros (HACCP), lo que requiere que las empresas categoricen los riesgos y establezcan controles. Serán obligatorios pasos adicionales para realizar la identificación de peligros, incluida la recopilación de información sobre el origen de los productos, los productos finales y los métodos de distribución y entrega.
El estándar actualizado también enfatiza la necesidad de evaluar regularmente el SGIA, además del monitoreo, medición y análisis habituales. Los auditores internos y externos deberán ir más allá de verificar que los procesos del SGIA estén claramente definidos y sean efectivos, determinando si producen buenos resultados. Los resultados de la auditoría deberán informarse a los equipos de gestión y seguridad alimentaria pertinentes, y toda la información debe estar documentada para demostrar la implementación y eficacia del SGSA.
APOYAR A LOS CLIENTES DURANTE LA TRANSICIÓN
En octubre de 2019, Bureau Veritas recibió la acreditación de UKAS (Servicio de Acreditación del Reino Unido) para respaldar la transición de los clientes a ISO 22000: 2018. Gracias a esto, nuestros auditores pueden realizar las auditorías necesarias para determinar la preparación de los clientes para la transición y el cumplimiento de la norma actualizada.
Dado el contexto, Bureau Veritas tiene como objetivo proporcionar opciones de transición flexibles para clientes de todo el mundo. Nuestros expertos pueden realizar auditorías de transición durante las auditorías de vigilancia programadas o las auditorías de recertificación. Si bien esto aumenta el tiempo requerido para realizar la auditoría, los clientes pueden someterse a ambas auditorías a la vez, evitando múltiples visitas de los auditores. En determinadas circunstancias, los clientes también pueden realizar auditorías de forma remota, en lugar de requerir un auditor in situ.
Bureau Veritas también ha agregado un nuevo módulo a su oferta de aprendizaje electrónico que proporciona información detallada sobre las últimas actualizaciones del estándar. Recomendado para cualquier persona que planifique, implemente, mantenga o audite un SGSA, el curso aclara todos los requisitos para lograr la certificación según la norma ISO 22000: 2018.
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